Duración: 30 minutos
Ubicación: Bahoruco – Sierra de Bahoruco, entre la montaña y los valles espirituales.
Intro (0:00 – 5:00 min)
El equipo llega al borde de la Sierra de Bahoruco, donde se rumorea que se encuentra un antiguo archivo de los Bohiques, enterrado bajo una montaña viva.
Güiro, con su ritmo relajado, va grabando todo como si fuera un documental.
Yariza siente una conexión intensa con el lugar… algo está despertando en su interior.
Desarrollo (5:00 – 15:00 min)
Entran a una grieta en la montaña donde hallan una ciudad taína subterránea, oculta por siglos.
Espíritus de antiguos Naborias les susurran advertencias: "Él aún habita aquí… el Behique Caído."
Kaoban analiza los símbolos: este lugar fue un centro de entrenamiento y evolución espiritual, donde los Caciques aprendían a fusionar su alma con la tierra.
La amenaza despierta (15:00 – 25:00 min)
Un grito sobrenatural sacude las cavernas.
Aparece Kohobá, el Behique Caído, una figura esquelética fusionada con roca y energía oscura.
Fue corrompido por los Dominantes, y ahora absorbe la energía vital de la montaña para volverse inmortal.
Su poder: Dominación del eco espiritual, puede reflejar ataques y proyectar ilusiones basadas en recuerdos.
Batalla brutal:
Shishu activa la Macoana de las Almas con una nueva técnica: "Embate Retumbante", que crea ondas oscuras que rompen la caverna.
Yariza despierta su nuevo poder: "Rugido Ancestral", un campo de energía dorada que quema lo corrupto.
Güiro lanza una bomba de sonido llamada "Perreo Místico" que hace colapsar una parte del techo (sí, ¡literalmente con ritmo!).
Clímax (25:00 – 30:00 min)
Kohobá, antes de morir, suelta una última advertencia:
"La montaña fue solo la primera. En El Seibo… se forja el arma que pondrá fin a todo."
El equipo escapa justo cuando la ciudad subterránea se desploma, dejando un cráter gigante visible desde los cielos.
Shishu ahora tiene un símbolo nuevo en su brazo izquierdo, representando la Conexión con la Tierra, elevando su sensibilidad a las energías del mundo.
El grupo se prepara para su próximo destino: El Seibo, donde se oculta un arma prohibida creada por los Dominantes con sangre taína